ARTICULO
Tacto pedagógico, su
relación socio-afectivo y ético en el proceso de enseñanza.
Elaborado
por: Carlos Rubén Padilla Molina
Dilma Luz Rivas
Polanco
Resumen
En este artículo se habla sobre el
tacto pedagógico, su relación socio-afectivo y ético en el proceso de enseñanza,
partiendo de los tiempos modernos debido a la tecnología que está empujando al
ser humano a utilizarla cada vez con más frecuencia, y por el ritmo acelerado
que lleva la sociedad que está más afanada por sobrevivir, que por vivir.
Palabras claves: Tacto
pedagógico, ética, desarrollo, socio-afectivo, enseñanza, amor, comprensión,
salón de clases.
Abstract
This article talks about the pedagogical touch, its socio-affective and ethical relationship in the teaching process, starting from modern times due to the technology that is pushing the human being to use it more and more frequently, and due to the rhythm accelerated that takes the society that is more anxious to survive, than to live.
Continuing with sensitivity as a pedagogical touch, emphasizing the consideration of sensitivity as a pedagogical touch that does not constitute a didactic strategy, rather as an educational proposal based on the formation of character as a way of preparing for life and ethical formation of the human being.
El
rol que cumple el docente es esencial en el desarrollo socio-efectivo de los
niños, niñas y jóvenes, en la actualidad el docente enfrenta una serie de
problemáticas partiendo de las clases virtuales a causa de la pandemia y la
ética profesional de cada uno de ellos.
En
este orden de ideas, el presente artículo se enfoca en el tacto pedagógico, su
relación socio-afectivo y ético en el proceso de enseñanza, cuestionado las
interrogantes: ¿Cómo influye el tacto pedagógico, socio-afectivo y ético en el
proceso de enseñanza en los estudiantes primaria y educación básica? Y ¿Cómo se
manifiesta el tacto pedagógico y ético en los docentes?
Además,
la preocupación de encontrar las posibles soluciones a las diferentes
problemáticas que se presentan en el salón de clases, por lo que se buscó
información bibliográfica de diversos autores para obtener un enfoque más
Desarrollo
En
estos tiempos modernos debido a la tecnología que está empujando al ser humano
a utilizarla cada vez con más frecuencia, y por el ritmo acelerado que lleva la
sociedad que está más afanada por sobrevivir, que por vivir. El tipo de
sociedad que se viene construyendo y desarrollando tiempo atrás con forme a su
cultura, valores morales educación en casa y diversos factores; todo esto ha
ocasionado, que se olvide, tanto a personas que están involucradas
completamente en el curso enseñanza- aprendizaje como personas ajenas a este
proceso.
La
preocupación por encontrar posibles soluciones a las diferentes problemáticas
que se presentan en las escuelas y principalmente en los salones de clases, es
fuente inagotable de innumerables investigaciones, por ende, es importante la
necesidad de encontrar posibles soluciones, ya que esto es prioridad de los
docentes y en general de todas las personas involucradas en el proceso de la
educación.
Los
docentes siguiendo con el método tradicional de enseñanza en donde el único que
habla y piensa es él, en lo que pretenden que los educandos ó alumnos aprendan
e interactúen en un clima artificial, en lo que ellos van desarrollando las
clases escolares. Este método de aprendizaje lo viene utilizando el profesor
desde épocas pasadas, pero aún en la actualidad y no tomando en cuenta los
diferentes estudios e investigaciones y sus recomendaciones, se siguen
aplicando hoy en día.
Una
de las diversas y múltiples situaciones que deben enfrentar los docentes con
sus alumnos de manera cotidiana, es que existe un constante enfrentamiento
debido a las diferentes personalidades y comportamientos que se dan dentro del
aula, por ello, es menester considerar el tema del tacto pedagógico para el
mejoramiento de las clases y la resolución de problemas, ya sea de manera
general en el centro educativo o en de salón de clases.
El
docente se enfrenta diariamente a situaciones que dificultan el desarrollo
habitual de las clases, como los problemas de conducta. Una manera de
abordarlas es aplicar técnicas basadas en la educación emocional. Este es el
caso del tacto pedagógico.
Siguiendo
con la idea anterior, un docente justo, que aplica el tacto pedagógico, es el
que se preocupa lo suficiente por sus alumnos para que cada uno de ellos reciba
las mismas oportunidades, al hablar de esto se refiere igual atención, ayuda,
apoyo, comprensión, etc. Otro aspecto es el sentido del humor, el humor
compartido elimina las barreras entre el docente y él alumno; además es
importante mencionar y no exagerando los educandos lo ven de diferente
perspectiva al profesor, convirtiéndose de esta manera como un aliado o amigo y
no como un adversario.
Por
lo tanto, aspectos como la falta de motivación de los alumnos o la existencia
de diferentes conductas disruptivas pueden evitarse en un gran porcentaje
gracias al tacto pedagógico. Para ello los docentes deben de evaluar su
metodología de enseñanza, establecer un clima propicio para el aprendizaje
adecuado y ser capaces de identificar el ritmo de enseñanza idóneo para cada
estudiante.
Por
lo que el tacto pedagógico en la labor docente adquiere un alcance superior,
debido a que el hecho de ser oportuno y justo en sus decisiones forma parte de
los elementos a considerar por parte de los estudiantes. Y el ejemplo es más
eficaz que las mejores reglas o normas expuestas y que las palabras más
persuasivas.
Para
lograr y alcanzar resultados morales satisfactorios, las opiniones del docente
acerca de sus alumnos deben ser positivos, satisfactorios, optimistas,
expresadas con actitud humana hacia ellos. En ese caso habrá un respeto mutuo
entre ambas partes y una saludable interrelación colectiva, con valores
internalizados y no falsa como por ejemplo la hipocresía.
No
se pude dejar de señalar que cuando se habla de tacto pedagógico, de esta brota
su relación con la verdad como un principio básico en la labor docente. Las
diversas sensaciones inmerecidas, motivadas por diversos estados de ánimos,
decisiones injustas y los falsos argumentos, también perjudican la dignidad de
los estudiantes y por consiguiente la educación moral. De acuerdo con Torres,
(2015):
Sin la verdad, la moral no existe, por
ello se le considera el fundamento de las grandes cosas que conciernen al
hombre, una forma de conocimientos de la realidad social, un medio de unión
entre los hombres y una vía de afirmación de la justa organización de la vida y
además un instrumento para mantener el orden en la sociedad. (pp. 5 y 6)
Según
lo anteriormente expresado, se hace evidente que la mayor o menor forma en que
se manifieste el tacto pedagógico con respecto a los estudiantes depende en
gran medida de la educación moral que en general posea el docente y de que sea
capaz, además, de asumir un tacto pedagógico hacia sus estudiantes con bases en
la ética pedagógica.
Resulta
indispensable señalar que para que el docente pueda dirigir el proceso
formativo en el centro educativo, este debe crear una atmosfera de benevolencia
y exigencia mutua, de respeto y solidaridad que propicien satisfacción moral e
intelectual. La influencia poderosa en el desarrollo de los diversos
sentimientos, conocimientos, voluntad y cualidades morales que ejerce el
docente hacia sus alumnos tiene un alcance superior en sus vidas.
La sensibilidad como
tacto pedagógico
Considerando
a la sensibilidad como un tacto pedagógico que no constituye una estrategia
didáctica, más bien como una propuesta educativa basada en la formación del
carácter como vía de preparación para la vida y la formación ética del ser
humano. El profesor Max Van Manen, concibe a la educación como un proceso que
entraña en la preparación del niño o joven para la vida. Manen, (1998) menciona
que:
La educación paternal y escolar derivan de
la misma y fundamental experiencia de la pedagogía: la tarea humana de proteger
y enseñar a los más jóvenes a vivir en este mundo y a responsabilizarse de sí
mismos, de los demás y de la continuidad y el bienestar del mundo. (pa.23)
Retomando
la idea del autor, la base de la educación para la vida es la formación del
carácter, como un modo ético propio de cada persona, que no es dado, sino que
se construye y expresa de acuerdo a las acciones, conductas llevadas a cabo de
forma libre y responsable, siendo el tacto pedagógico que puede desarrollar el
docente en su proceso de enseñanza, siendo de gran relevancia para la formación
del carácter dado, mediante la sensibilidad, la dimensión efectiva y ética del
proceso educativo.
La
sensibilidad pedagógica, es de gran importancia desarrollarse en sintonía con
los estudiantes, el docente debe de tener disposición de atender a sus alumnos,
manifestando una actitud abierta y muy atenta para detectar sus necesidades
educativas y para descubrir e impulsar el potencial con el que cuentan cada uno
de sus estudiantes, señalando que el tacto pedagógico es una respuesta sensible
y ética en cuanto a las necesidades afectivas, cognitivas y psicológicas de
cada alumno.
Por
lo tanto, el docente adquiere la sensibilidad o tacto pedagógico a partir del
resultado de la experiencia y vivencia de la enseñanza que moldea esa forma de
ser sensible y comprensivo ante las situaciones imprevistas o a las
problemáticas educativas que se viven cotidianamente en el aula, de acuerdo con
Manen, (1998): ¨reconoce que este tipo de
sensibilidad involucra la reflexión, también considera que no es resultado de
la razón, sino que proviene del corazón¨.
De
la misma forma, se puede entender que la fuente del tacto pedagógico es el amor
que el docente tenga por su profesión y por su quehacer educativo, sin el
sentimiento del amor es muy difícil que el docente cultive el tacto pedagógico,
Amilbaru, (2013) define el sentimiento del amor como: ¨el desear y procurar el bien para alguien¨. (p. 88). Siguiendo la
misma línea de pensamiento, el amor del docente se puede entender como un
anhelo que persigue para que sus estudiantes alcancen su bien verdadero.
Siguiendo
la idea anterior, es muy importante reflexionar sobre el significado que se le
da al tacto pedagógico en términos de amor, valores morales, ya que no solo se
puede comprender las virtudes como la prudencia, siendo una forma de sensibilidad
y va emparejada con los sentimientos morales para los estudiantes abarcando la
empatía, solidaridad, la compasión, llevando a la enseñanza a una práctica del
tacto pedagógico transformando a una simple instrucción de una enseñanza con
ética.
Como
ya se ha mencionado, la sensibilidad como tacto pedagógico encaminada a una
forma efectiva y moral ayuda al docente a impulsar la disposición para asumir
la responsabilidad, un docente que carece de sensibilidad es difícil que
perciba y comprenda la asimetría establecida en la relación entre docente y
estudiante, convirtiéndolo en un ser incapaz de detectar la vulnerabilidad en
la que se encuentra si estudiante en el proceso de formación.
Por
lo tanto, la importancia que tiene el tacto pedagógico o la sensibilidad para
que el docente sea capaz de ser responsable de sus estudiantes, se destaca el
pensamiento de Ortega, (2013), quien considera que ¨la raíz de esta disposición ética del docente es su sensibilidad moral¨
(p. 25). Es decir, que la capacidad de sentir, conmoverse y responsabilizarse
ante la vulnerabilidad del estudiante, ya que ellos tienen la necesidades y
proyectos que requieren la atención y apoyo por parte de sus docentes.
A manera de conclusiones
El
tacto pedagógico ofrece a los docentes de comprender y vivir el proceso
educativo como una transformación tanto ética como educativa ya que todo este
desarrollo es profundamente humano, y que por ello es capaz de incidir y calar
en la futura forma de ser, formar valores, cultura y comportamiento de los
estudiantes en la escuela.
En
este sentido, es necesario que el docente reflexione sobre su rol y quehacer
sobre la forma como esta interactuando con sus estudiantes, de manera que
promueva estrategias y forma de trabajo que enriquezca su pedagogía y brinde un
proceso formativo e integral que garantice la interacción y participación de
los estudiantes ante la sociedad. En relación con el tacto pedagógico en el
proceso de desarrollo socio-afectivo, se busca que la escala sea un espacio de
diversión, es decir, un escenario de interacción social para los estudiantes,
en donde puedan aprender, divertirse y compartir con sus compañeros.
Cuando
un docente no actúa con ética y tacto pedagógico es inevitable que en la
relación socio- afectiva surjan problemas contradicciones, conflictos dentro
del centro educativo o del salón de clases, ya que afecta la educación moral y
consecuentemente la formación de la identidad de los estudiantes, ya que la
practica educativa muestra que el docente es como un espejo en el que los propios
alumnos se miran.
La
importancia del tacto pedagógico en la práctica docente y su relación con el
proceso de educación moral y la formación de identidad de los estudiantes,
demuestra que el enriquecimiento moral de estos transcurre y se desarrolla en
la medida que se van incorporando vínculos y relaciones sociales.
Referencias
bibliográficas
Amilbaru, M. G. (2013).
En el aula y fuera de ella: educar con la vida. Edetania .
Manen, M. V. (1998). El
tacto en la enseñanza. El significado de la sensibilidad pedagógica. Barcelona,
Paidós
Navarrete. R. (2005). El tacto pedagógico como estrategia para el manejo de la disciplina en el aula. Colombia. Universidd Pedagogica Nacional. Colombia
Ortega, P. R. (2013). Educar es responder a la pregunta del otro. Boletin Virtual REDIPE .
Torres, M. (2015). El tacto pedagógico y su connotación en la educación moral y la formación de la identidad. 1st ed. Haba. Cuba
Muy interesante lectura. Me gustaría conocer más sobre la docencia
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